SAL Y ADITIVOS – HÁBITOS ALIMENTACIÓN
Punto 4. ¿Controlas la cantidad de sal que usas en la cocina? ¿Sabías que los condimentos son un gran complemento para dar sabor y propiedades a tus platos?
La sal es uno de los ingredientes más utilizados en la alimentación. Usado como condimento para potenciar al sabor de lo que comemos y hacerlo más sabroso. Pero, ¿realmente es necesaria?
No se tienen detalles exactos de cuando comenzó a usarse la sal por primera vez, tanto como alimento como conservante. Incluso en la naturaleza hay animales que obtienen sal al lamer determinadas rocas. Pero lo cierto, es que el uso de la sal se remonta a tiempos muy lejanos y a muchas culturas. Su uso como conservante permitió el transporte de alimentos de unas zonas a otras.
Actualmente tenemos otros medios de conservación para los alimentos, pero la salazón no ha perdido adeptos. Sin embargo, su uso en cocina encuentra diferentes puntos de vista. Por un lado, es cierto nos proporciona minerales que son necesarios para el funcionamiento de nuestro cuerpo, pero por otro lado, su uso y abuso provoca problemas de salud a largo plazo (tensión alta, retención de líquidos, pérdida de calcio, entre otros.)
Por eso es importante plantearnos si realmente necesitamos cocinar todo con sal. Ciertamente no es necesario. Hay alimentos que tienen un gran sabor de forma natural, ya son sabrosos de por sí, solo tenemos que acostumbrar a nuestro paladar. Sin embargo, existen en el mercado gran variedad de opciones para sustituir la sal de mesa. Por ejemplo la sal de Himalaya, más rica en minerales que compensan el contenido en sodio tan elevado en la sal de mesa convencional.
También existen condimentos y especias con grandes propiedades, que puede ayudar a crear platos ricos y nutritivos, beneficiando nuestra salud. Condimentos naturales como el ajo, la cebolla, los tomates, los pimientos, las especias, etc. Estas últimas pueden llegar a transformar tus platos y hacer que no te aburras de la comida. Por ejemplo el comino, el cilantro, el perjil, el hinojo, la pimienta, el pimentón, el orégano, el tomillo, la albahaca, la cúrcuma, el jengibre, el clavo, etc. que pueden sazonar y dar sabor a sus platos. Y muchas de ellas tienes aceites esenciales con propiedades antisépticas, antiparasitarias y antiinflamatorias.
Evitar alimentos precocinados y procesados también debe ser una prioridad para disminuir el consumo sal, así como no abusar de los productos cárnicos procesados como embutidos y chacinas.
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